Los problemas a nivel motor, emocional, sensitivo así como
las fluctuaciones en el estado clínico pueden provocar problemas en la
alimentación.
LAS DIFICULTADES DE ALIMENTACIÓN DE ESTA ENFERMEDAD SE PUEDEN RELACIONAR PRINCIPALMENTE CON:
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Ø Alteraciones en la habilidad manual para la autoalimentación.
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Ø Alteraciones de la postura, equilibrio y coordinación de los movimientos para comer y tragar.
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Ø Problemas en la manipulación de alimentos en la boca, con pérdidas
y restos de comida en la cavidad oral.
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Ø Alteración en el paso de alimento a faringe y esófago.
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Ø Problemas en la protección de la vía aérea en el momento de tragar,
provocando tos y atragantamientos.
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Ø Interferencia de algunos alimentos con la absorción de fármacos.
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Ø Pérdida de apetito.
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Algunos consejos para mejorar en la alimentación son:
Ø Beber agua fría o
gaseosa antes de comer, ya que se estimula el reflejo de deglución.
Ø Cerrar la boca al
tragar.
Ø Sentarse
correctamente
Ø Espalda recta
Ø Cuello recto
Ø Cerca de la mesa
Ø Tomar un primer
plato fácil de tragar (puré, sopa…) y un segundo plato más sólido.
Ø Evitar la
acumulación de saliva.
Algunas ayudas técnicas:
Ø Vasos y platos irrompibles
Ø Vasos con asideros
Ø Antideslizante debajo del plato
Ø Engrosadores en los cubiertos para facilitar
el agarre
Ø Plato térmico
Ø Arco de plato para que no se salga la comida
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